Elige Armas

Econometría
Historia Peseta
Madrid Antiguo
Escritura Jeroglífica
Palabras Olvidadas
Estados Pontificios
La Inquisición
Masonería

Egipto, Cuaderno I - Portal Fuenterrebollo

Egipto, Cuaderno III - Portal Fuenterrebollo

Escritura Jeroglifíca Egipto - Portal Fuenterrebollo

 

 

El nombre de Alcañiz tiene origen árabe, Al-Qannis, que podría significar cañizo o las cañas.

Los orígenes de Alcañíz vienen de una antigua fortaleza romana, que pasó a dominio musulmán, siendo recuperada en 1119 por Alfonso I de Aragón.
En 1124 el rey aragonés cedió la fortaleza a los hermanos Fruela y Pelayo, que no tardaron en perder.

En 1157 por Ramón Berenguer IV, Conde de Barcelona y Rey de Aragón por su matrimonio con Petronila de Aragón, conquista poblaciones del Bajo Aragón, entre otras, Alcañíz, villa a la que otorga la Carta Blanca.

En 1179 Alfonso II de Aragón 'El Casto', Rey de Aragón y Conde de Barcelona tras el fallecimiento de su padre Ramón Berenguer IV, dona el Castillo de Alcañíz y un amplio territorio a la Orden de Calatrava, aunque sus habitantes siguieron disfrutando las prerrogativas que concedía la Carta Blanca y teniendo sus representantes en las Cortes de Aragón.

Las relaciones de los pobladores con la Orden de Calatrava nunca fueron buenas, hasta que en la primavera de 1283 los habitantes de la villa de Alcañíz se sublevan contra la presión señorial de la Orden de Calatrava.

En cinco ocasiones se celebraron Cortes en Alcañíz: En 1250 con Jaime I de Aragón. Entre 1371-1372 con Pedro IV de Aragón. En 1442 con Alfonso V de Aragón.
En 1436 fueron presididas por Juan I de Navarra. Se establece que el cargo del Justicia fuera solo responsable ante las Cortes. Se aprueba un subsidio para la continuación de la guerra en Italia.
Entre 1441-1442 fueron convocadas por la reina María de Castilla. Se declara el cargo del Justicia vitalicio e irrevocable sin autorización de las Cortes.

El 15 de febrero de 1412, después de un largo proceso iniciado meses atrás por los representantes de Aragón (reunidos en Alcañíz) y de Cataluña (reunidos en Tortosa), en la Iglesia de Santa María la Mayor de Alcañíz se acuerdan veintiocho capítulos con las condiciones para la elección de rey, tras la muerte sin heredero de Martín I de Aragón el 31 de mayo de 1410, proceso al que se conoce como La Concordia de Alcañiz, previo al Compromiso de Caspe (25 de junio de 1412), por el que se nombró rey a Fernando de Antequera, miembro perteneciente a la dinastía Trastámara, hijo segundo de Juan I de Castilla y de Leonor de Aragón, hermano de Enrique III de Castilla.


Inicio de la Concordia de Alcañiz. 15 de febrero de 1412

Los representantes de los reinos de Aragón, Valencia, y el Principado de Cataluña, en el Compromiso de Caspe (25 de junio de 1412) establecen un pacto para elegir un nuevo rey tras la muerte sin descendencia y sin nombrar un sucesor de Martín I.
Los nueve compromisarios eligen por unanimidad como rey de la Corona de Aragón a Fernando de Antequera, miembro perteneciente a la dinastía Trastámara.

Representantes Corona de Aragón: Domingo Ram, Obispo de Huesca. Berenguer de Bardají, letrado general de las Cortes de Aragón. Francisco de Aranda, enviado por Benedicto XIII.
Representantes Principado Cataluña: Pedro de Sagarriga, Arzobispo de Tarragona. Guillem de Vallseca, letrado general de las Cortes de Cataluña. Bernardo de Gualbes, Conseller de Barcelona.
Representantes Reino Valencia: Bonifacio Ferrer, Prior de la Cartuja de Portaceli. Vicente Ferrer, dominico. Pedro Beltrán, que sustituyó por enfermedad a Ginés Rabassa, experto en derecho.

En el siglo XV el Concejo toma la preponderancia en Alcañíz y en el Bajo Aragón, gracias al apoyo de los Reyes de Aragón, al surgir de la nobleza local, y al progresivo deterioro de las Órdenes Militares al finalizar la Reconquista en 1492.

El símbolo del Concejo serán las Casas Comunes, como se observa en un fragmento de mural que conserva la actual Casa Consistorial, que junto a la aparición de la Lonja y la Plaza Mayor (actual Plaza de España), así como el desarrollo urbano dentro del recinto de la Muralla del siglo XIV, conocida como Muralla Baja, transforman la villa de la Orden de Calatrava en una villa renacentista.

En el siglo XVI se comienzan a definir los límites de la villa, donde coinciden en destacado grupo de humanistas, entre ellos, Juan Sobrarias, Pedro Ruiz de Moros, Juan Lorenzo Palmireno, Andrés Vives y de Domingo Andrés.

La expulsión de los moriscos en 1609 (1610 en Aragón), en una comunidad de agricultores y artesanos, supuso una gran quiebra económica.

La Guerra de Cataluña en 1640 también supuso una gran carga para Alcañíz y comarca al tener que contribuir con hombres y dinero. En recompensa, Felipe IV concedió a Alcañíz el título de ciudad en 1652.

Con la Guerra de Sucesión Española (1701-1713) se instaura la Casa de Borbón en el trono de España, que había quedado dividida entre partidarios del Archiduque Carlos de Habsburgo (mayoritarios en la Corona de Aragón) y Felipe V (apoyado por la Corona de Castilla).

La ciudad de Alcañíz toma parte por el representante de la Casa de Habsburgo, que cae en manos de Felipe V. Con el primer Decreto de Nueva Planta (1707) se suprimen los Fueros de Aragón, desaparece el Justicia, las Cortes, la Diputación, el Virrey, y se crean trece corregimientos, de los que el de Alcañiz, después del de Zaragoza, será uno de los más extensos y de mayor población. La división territorial perdurará hasta la división provincial de 1833.

El Castillo de Alcañíz o Castillo de los Calatravos tuvo un papel decisivo en la Reconquista de la villa en 1157, sus dependencias más antiguas datan de los siglos XII y XIII, destacando la Torre del Homenaje, el Claustro y la Capilla. Alberga importantes pinturas murales del gótico lineal de principios del siglo XIV. Durante los siglos XIV y XV se agregaron elementos mudéjares de ornamentación, tanto en el Castillo como en las murallas. La Fachada data del siglo XVI. Desde 1968 es un Parador Nacional de Turismo.


Fachada principal del Palacio de los Comendadores.

La zona más antigua del Castillo de Alcañíz es la zona nordeste, donde se ubica la Torre del Homenaje y la Capilla.

En 1179 el rey aragonés Alfonso II otorga el Castillo, así como un grupo de aldeas vinculadas a la villa, a la Orden Militar de Calatrava, que ubica allí la Sede de la Encomienda. Los pobladores de la Villa y la Orden Militar siempre estuvieron enfrentados, la Encomienda Mayor de Calatrava no respetaba las libertades que el rey aragonés Ramón Berenguer IV había concedido a la villa en 1157 al otorgarle la Carta de Población. En 1283 se sublevaron contra el poder señorial de los calatravos.

Al morir el monarca Martín I de Aragón (31 de mayo de 1410) sin descendencia, la villa de Alcañíz se convirtió en residencia del parlamento aragonés (que se alojó en el Castillo de los Calatravos entre septiembre de 1411 y julio de 1412), y de aquí salieron los nueve jueces o representantes que debían elegir un nuevo rey para Aragón en lo que se conoce como la Concordia de Alcañíz.


Palacio del Infante don Felipe, Palacio de los Comendadores, ocupando el ala sur del conjunto del Castillo, de estilo barroco, conservando en su fachada principal la tradición del palacio aragonés del tardorrenacimiento.

El Palacio de los Comendadores, levantado sobre estructuras medievales del antiguo castillo calatravo, está flanqueado por dos torres y se estructura en tres plantas: la inferior, de piedra de sillar y las dos superiores, de ladrillo. En la planta noble lucen balcones y en la planta superior se desarrolla la característica galería aragonesa, creada por la sucesión de vanos definidos por arcos de medio punto, coronada por un gran alero. En el centro se dispone la portada acogida por un gran arco de medio punto.


Fachada principal del Palacio de los Comendadores.

El castillo de Alcañíz, por su organización convento-palacio, sus grandes dimensiones y mezcla de estilos arquitectónicos, es uno de los más complejos de la Corona de Aragón. El recinto de la fortaleza tiene planta trapezoidal, donde se distinguen claramente dos zonas: La Norte con construcciones medievales (Torre del Homenaje, Claustro ojival e Iglesia en estilo gótico, y una Portada románica). La Sur de estructura civil, con el Palacio barroco de los Comendadores (actual Parador Nacional).


Puerta principal del Castillo de los Comendadores de Alcañíz. Una leyenda sobre el arco de la entrada cita al infante don Felipe y el año 1738, aunque estudios anteriores a la habilitación del edificio como Parador Nacional señalan la fecha de 1728.


Conjunto de pintura mural del castillo calatravo de Alcañíz, uno de los conjuntos más importantes de pintura mural gótica de la antigua Corona de Aragón.

Torre del Homenaje, gótica del siglo XIV, con cuatro plantas. En el bajo, un pórtico con acceso de gran arcada, que da paso a la Iglesia de Santa María Magdalena y una Portada románica. En la segunda planta luce una ventana ojival bajo arco cobijado apuntado. En el tercer piso una ventana de medio punto. En la planta superior, dos huecos de medio punto.

En la Iglesia o Capilla de Santa María Magdalena se celebraban actos solemnes y el armamento de caballeros calatravos. La Torre del Homenaje y la Iglesia eran las estancias más importantes del castillo.
La Puerta románica permite el paso a la Capilla. Se encuentra definida por arquivoltas de medio punto que descansan sobre pares de columnas acodilladas en las jambas, con capiteles invertidos sin decoración.
La Capilla es de una sola nave, en el lado del Evangelio se encuentra el mausoleo de Juan de Lanuza, Comendador Mayor de Alcañíz y Virrey de Aragón.

El antiguo Claustro del Castillo-Convento se encuentra adosado al muro sur de la Capilla, se accede mediante una portada definida por arquivoltas de medio punto que descansan sobre pares de columnas acodilladas en las jambas y con capiteles decorados con motivo de entrelazo.
Probablemente el Claustro se inició a la vez que la Capilla, aunque sobre el año 1300 se reformó, definido por crujías de dos arcos apuntados, que apoyan en pilares de sección cuadrada.


Castillo-Convento de la Orden de Calatrava, lugar de residencia de comendadores, priores y alcaides de la Encomienda Mayor y Priorato de la Orden de Calatrava.


Panorámica del Palacio de los Comendadores (actual Parador Nacional de Alcañíz), desde el Castillo-Convento de los Calatravos.


Panorámica del Palacio de los Comendadores (actual Parador Nacional de Alcañíz), desde el Castillo-Convento de los Calatravos.


En la Plaza España alcañizana, El Ayuntamiento forma ángulo con la Lonja. A escasos metros, la Excolegiata de Santa María la Mayor.

El Ayuntamiento de Alcañíz presenta una fachada principal de piedra, con tres plantas: La inferior, con arco de entrada de medio punto, flanqueado por columnas toscanas, a ambos lados dos ventanas adinteladas en simetría. La segunda planta tiene tres ventanas adinteladas flanqueadas por columnas jónicas, coronadas con frontones triangulares. La ventana central fue cegada en el siglo XVIII para colocar el escudo de la ciudad. El tercer piso luce con la galería de arcos de medio punto aragonesa que apoya en columnas toscanas.


Escudo de armas del Ayuntamiento de Alcañíz, sustituyendo a la ventana central de la planta noble, cegada en el siglo XVIII.

La Lonja gótica de Alcañíz, formando escuadra con el Ayuntamiento, se encuentra rematada por arquería corrida del siglo XVI y gran alero con lunetos del siglo XVIII. Un magnífico resto de la arquitectura civil gótica, levantada en el siglo XV, imitación de las loggias italianas cuatrocentistas, presenta tres esbeltos arcos apuntados, dos de ellos decorados con arquillos lobulados.


Lonja gótica y Ayuntamiento de Alcañíz.

La Iglesia de Santa María la Mayor de Alcañiz fue Colegiata entre 1407-1851. Del conjunto sobresale la torre-campanario del templo gótico, primera mitad del siglo XIV, adosada por el lado del Evangelio a la actual Iglesia barroca, de grandes proporciones, con planta cuadrada ochavada y cuatro plantas superpuestas.

El Templo gótico, además de su función religiosa y militar, tuvo una función simbólica de rivalizar con la Torre del Homenaje del Castillo de los Calatravos, representando el poder del Concejo alcañizano frente a la Orden Militar. Posiblemente la Iglesia gótica sería de tres naves. Destruido el templo gótico, la nueva edificación se inicia el 20 de mayo de 1736, según planos de Domingo de Yarza.

La Iglesia de Santa María tomó el título de Colegiata por Bula de 13 de mayo de 1407 de Benedicto XIII (El Papa Luna). En la sacristía de la actual Iglesia barroca se conservan un conjunto de pinturas góticas y renacentistas en tabla, atribuidas a Domingo de Ram y al Maestro de Alcañiz.


La Iglesia de Santa María la Mayor de Alcañiz fue Colegiata entre 1407-1851. Del conjunto sobresale la torre-campanario del templo gótico, primera mitad del siglo XIV.
El Templo gótico, además de su función religiosa y militar, tuvo una función simbólica de rivalizar con la Torre del Homenaje del Castillo de los Calatravos.


Teatro Municipal de Alcañíz, próximo a la Plaza de España y junto al Antiguo Mercado. Levantado en el espacio que quedó libre tras la explosión de un polvorín el 2 de septiembre de 1840.