 Denario (193-194) 30 euros
El Denario fue una pieza romana de plata, con un valor inicial de 10 ases. La primera acuñación se remonta al 268 a.C, con un peso inicial de 4,54 gramos (sexta parte de una onza). En el 212 a.C el denario (símbolo X) se convirtió en la base del sistema monetario sustituyendo al As como moneda de referencia, pasando del patrón cobre al patrón plata. Las fracciones del denario son: Quinario (símbolo V) con valor de 1/2 denario. El Sestercio (símbolo IIS) con valor 1/4 de denario. El As (símbolo I) con valor 1/10 de denario. La Lex Flaminia (217) fijo su peso en 3,90 gramos, pasando a equivaler a 16 Ases. En el año 64 el emperador Nerón redujo su peso a 3,4 gramos. Paulatinamente su peso se fue reduciendo, Marco Aurelio lo fijó en 2,36 gramos y con Septimio Severo pasó a 1,70 gramos. Bajo el gobierno de Caracalla comenzó a introducirse el Antoniniano, moneda que acabaría con el denario durante el mandato de Gordiano III. En un principio, los denarios en el anverso portaban imágenes de divinidades romanas, mientras que en el reverso lucía la imagen de Dioscuros (Cástor y Pólux) tirando del carro de la Victoria o una cuadriga arrastrando el carro de Júpiter o de Marte. Posteriormente, fueron desapareciendo las divinidades dando lugar a imágenes variadas, según el gusto del magistrado que dirigía la acuñación. Al final del Triunvirato de Julio César, en una cara de las piezas aparecía el retrato del personaje que las autorizaba. Publio Helvio Pertinax, tras su muerte (193) se convirtió en el primer emperador del Año de los Cinco Emperadores, le sucedió Didio Juliano. |