Nicéforo II Focas, emperador bizantino (963-969), general de la frontera oriental con Constantino VII. Después de sufrir una derrota en el 956 contra los sarracenos, siendo general del emperador Romano II dirigió una nueva expedición a Creta, derrotando a los sarracenos y saqueando Candía. Durante las campañas de 962-963 logró extender la frontera bizantina hacia el Este con la toma de sesenta ciudades fronterizas, entre las que se encontraba Alepo (la mayor ciudad de Siria).
Los Abasíes en 962 firmaron un tratado de paz favorable a los bizantinos, asegurando las fronteras durante veinte años.
El emperador bizantino Romano II moría inesperadamente el 15 de marzo de 963, según distintos historiadores, bien a causa de la bebida o bien envenenado por su esposa Teófano Anastaso, mujer inteligente y sin escrúpulos, que había conseguido que sus hijos (futuros emperadores Basilio II y Constantino VIII) fueran coronados co-emperadores.
Tras la muerte de Romano II, la emperatriz Teófano fue nombrada regente, aunque se le impuso gobernar con José Bringas (alto funcionario, consejero principal de Romano II). El eunuco José Bringas pretendió conservar el poder de decisión en los asuntos de importancia y hacerse con parte del poder que ejercía Nicéforo Focas, general en jefe del ejército bizantino con intensas relaciones con la aristocracia.
Las intrigas de José Bringas hicieron que Teófano y Nicéforo Focas se aliasen en su contra. El 15 de agosto de 963, el general Focas dio un golpe de estado penetrando violentamente en Constantinopla, dando muerte de Bringas se hizo coronar emperador al día siguiente en Hagia Sofía (Santa Madre Sofía, antigua Iglesia patriarcal ortodoxa). Nicéforo II relegó a la viuda emperatriz Teófano a la fortaleza de Petrión, en las colinas del Cuerno de Oro. El 20 de diciembre de 1963, Nicéforo II y Teófano se casaban en la Iglesia Nea (Nueva) del Palacio Imperial.
Durante su gobierno acontecieron numerosas guerras. En los años 964-966 se encargó de conquistar definitivamente Cilicia (en la costa meridional de la península de Anatolia), entrando en Mesopotamia y Siria. En 968 había incorporado al Imperio la mayor parte de las fortalezas de Siria, tras la toma de Antioquía y Alepo en 969, afianzó los dominios con un tratado de paz.
Tras renunciar a pagar tributo al califato Fatimí (cuarto califato islámico que convirtió Egipto en el centro de sus dominios), envió al patricio Nicetas entre 964-965 al enfrente de una expedición a Sicilia, que tuvo que abandonar tras ser derrotado en mar y en tierra. En el 967 firmó la paz con los musulmanes, dirigiendo su ejército contra un enemigo común de ambos, el emperador Otón I del Sacro Imperio Romano Germánico, que había atacado posesiones bizantinas en Italia. Después de algunas victorias iniciales, el ejército bizantino fue derrotado y relegado a la costa meridional.
Entre sus aportaciones, cabe señalar un tratado sobre táctica militar, con información relevante sobre el arte de la guerra en la época.
La emperatriz Teófano cansada del emperador Nicéforo II se convirtió en amante de su sobrino, Juan I Tzimisces, al que llevó a Constantinopla. Ambos conspiraron contra el muy religioso emperador, siendo el propio Juan I quien asesinó a su tío en diciembre del 969.